29.11.11

Eighty Letters de Václav Kadrnka

Eighty Letters de Václav Kadrnka es una cinta de la República Checa, ambientada a comienzos de los años ochenta, cuando se vivía bajo el régimen socialista alienado a la ex URSS. El cineasta ha señalado que se trata de un filme autobiográfico y que esboza los recuerdos de su adolescencia, cuando su madre organizaba un futuro reencuentro con su padre, quien vivía en Londres como migrante.

La anécdota se traduce en un largo día (se nota el tiempo soso y apesadumbrado de la jornada), en que el hijo, así a secas, sin nombre, falta al colegio para alcanzar a su madre, quien se dirige a a la ciudad, quizás Praga, para hacer unos trámites para el padre ausente. Juntos irán a diversas oficinas y sedes burocráticas en lides de alma interminable, donde la madre deberá juntar una serie de requisitos, que serán enviados al padre en una maleta marrón junto a ropa, zapatillas y salchichones checos.

Václav Kadrnka elabora un filme de apariencia minimal, lleno de planos cerrados, donde su cámara se detiene en tiempos muertos que afianzan el paso lento de las horas, con ausencias y casi siempre en contrapicado. Somos testigos de los pasos, de los pies de los personajes en su caminar, de la mano del hijo que impide que una estampita se escape con el viento, del tránsito de la maleta con regalos para el padre que será encargada a una pareja de ingleses.

Lo más interesante de Eighty letters (República Checa, 2011) es su aura de nostalgia , no en la ambientación ni en la fotografía de matices verdosos o marrones que roza el sepia, sino aquella que se traduce en la visión áspera y a la vez atrayente de la figura de la madre. Un "complejo de edipo" retraído y sugerente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario